La alternativa del Nuevo Mundo de Derek Walcott: memoria colonial, imágenes emblemáticas, y la "pequeña gente"

• Autores: Fumagalli, Maria Cristina
• Año de publicación: 2025
• Idioma: español castellano
• Tipo de recurso: artículo
• Fuente: Orbis Tertius, 30(41), e324. (2025); ISSN 1851-7811
• Materia: Literatura; Derek Walcott; Drums and Colours; Diego Rivera; Muralismo mexicano; Historia caribeña; Derek Walcott; Drums and Colours; Diego Rivera; Mexican Muralism; Caribbean History
• Institución: Universidad Nacional de La Plata. Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación

En 1957 se le encargó al relativamente joven Derek Walcott (tenía entonces 27 años) una obra teatral destinada a la celebración de la Apertura del Primer Parlamento Federal de las Antillas Inglesas el 23 de abril de 1958. El resultado fue Drums and Colours, una pieza que pone en escena cuatrocientos años de la compleja y turbulenta historia del Caribe, basada, como el propio Walcott declarara, en "cuatro imágenes emblemáticas: Colón en cadenas; la pintura de Millais The Boyhood of Raleigh (La niñez de Raleigh); el cochero de la familia Breda, Toussaint L'Ouverture, y el martirio de George William Gordon por la independencia de Jamaica". Al llamar la atención sobre estas "imágenes emblemáticas", Walcott revela que Drums and Colours se originó en una matriz visual, invita a considerar la obra como una extendida interpretación verbal de estímulos visuales y subraya la importancia de la interdisciplinariedad para su agenda decolonial. Al analizar estas imágenes de Walcott, argumentaré que la obra del muralista mexicano Diego Rivera es otra importante, aunque no reconocida, fuente visual de Drums and Colours, que pone de manifiesto el modo en que las ideas y la obra del joven Walcott estaban profundamente impregnadas de su sentido de fidelidad con la vasta región del mar Caribe y con la agenda emancipatoria de su "pequeña gente".
In 1957 a relatively young Derek Walcott (he was twenty-seven at the time) was commissioned a play aimed at celebrating the Opening of the First Federal Parliament of The West Indies on the 23rd of April 1958. The result was Drums and Colours, a play which stages four hundred years of the complex and troubled history of the Caribbean based, as Walcott himself declared, on "four emblematic images: Columbus in chains, Millais's painting The Boyhood of Raleigh, the coachman of the Breda family Toussaint L'Ouverture, and the martyrdom of George William Gordon for Jamaican independence'. Drawing attention to these 'emblematic images', Walcott reveals that Drums and Colours originated from a visual matrix, invites us to consider the play as an extended verbal rendition of visual prompts, and highlights the importance of interdisciplinarity for his decolonial agenda. Whilst looking at Walcott's visual prompts, I will be arguing that the work of the Mexican muralist Diego Rivera is another important, if unacknowledged, visual source for Drums and Colours which reveals how the young Walcott's views and work were deeply inflected by his sense of allegiance to the vast Caribbean sea-region and to the emancipatory agenda of its "little people".
Fil: Fumagalli, Maria Cristina. Universidad de Essex, Inglaterra.