Infección por Balamuthia mandrillaris y Toxoplasma gondii en sistema nervioso central y posible rol de la ameba como caballo de Troya

• Autores: Perazzo, Juliana M; Degese, María Fernanda; Ledesma, Bibiana A; Nigro, Monica; Palma, María Belén; Nappe, Joana B.; Randazzo, Viviana; Epelbaum, Carolina; Lubieniecki, Fabiana; Lamas, Gabriela; Correa Louzao, E.; Denoi, Mariana; Vizzo, Andrea; Braica, María Victoria; Batalla, Marcelo; Buchovsky, Ana; Palacios, Christian; Rugilo, Carlos; Flores Arnez, Josmar; Medina, Florencia; Cuba, Facundo; Poklépovich, Tomás; Pérez Garófalo, Magalí B.
• Año de publicación: 2025
• Idioma: español castellano
• Tipo de recurso: artículo
• Materia: Ciencias Médicas; amebas de vida libre; sistema nervioso central; diagnóstico; free living amoebae; central nervous system; diagnosis
• Institución: Universidad Nacional de La Plata

Las infecciones en sistema nervioso central (SNC) por Balamuthia mandrillaris y Toxoplasma gondii son poco frecuentes. Su diagnóstico precoz es fundamental para instaurar un tratamiento oportuno. Se describe un caso clínico de una paciente inmunocompetente previamente sana con afectación cerebral por B. mandrillaris y T. gondii, con serología persistentemente no reactiva para este último, recibida en un hospital pediátrico de tercer nivel de atención. Existe en bibliografía evidencia de que amebas de vida libre y T. gondii pueden habitar los mismos ambientes en la naturaleza, y que las primeras pueden fagocitar ooquistes de T. gondii, permitiendo retener la infectividad de éstos en su interior. Por lo que se plantea la posibilidad de que T. gondii haya accedido al SNC de la paciente en el interior de la ameba, permaneciendo oculto para el sistema inmune del hospedero. La paciente evolucionó favorablemente post resección quirúrgica y tratamiento antimicrobiano de su infección.
Balamuthia mandrillaris and Toxoplasma gondii central nervous system infections (SNC) are rare. Early diagnosis of these infections is vital for proper treatment onset. The study describes a clinical case of an immunocompetent patient with B. mandrillaris and T. gondii cerebral infection, who had a persistently non-reactive toxoplasmosis serology, attended in a tertiary care children’s hospital. There are reports that these free-living amoebas and T. gondii can co-habit the same places in nature, and that free-living amoebas can phagocytize T. gondii oocysts, allowing them to retain their infectivity inside the amoeba. Because of this, we consider the possibility that T. gondii may have entered into the patient’s central nervous system inside the amoeba, avoiding contact with the host immune system. The patient improved after surgical resection of the cerebral lesion and antimicrobial treatment.
Asociación Parasitológica Argentina