Revisión del uso de membrana amniótica para el tratamiento de queratoconjuntivitis seca canina

• Autores: Comito, Rocío A.; Rotela, Matías; Santa Cruz, Natalia; Berra, Alejandro; Michelini, Flavia M.; Guerbi, María Ximena; Moreno, Griselda Noemí
• Año de publicación: 2024
• Idioma: español castellano
• Tipo de recurso: documento de conferencia
• Materia: Salud; Patología; Tratamiento; Ojo seco
• Institución: Universidad Nacional de La Plata

Desde hace más de siglo son conocidos los efectos antiinflamatorios, inmunomoduladores y regeneradores de heridas de la membrana amniótica (AM). El uso de membrana amniótica en humanos (hAM) y en canes (cAM) es de gran utilidad en oftalmología. La utilización clínica de AM está mucho más difundida en humanos, asimismo existen miles de publicaciones científicas en humanos y solo una decena en caninos. Hasta hace pocos años el uso de AM era exclusivamente quirúrgico principalmente en úlceras corneales persistentes y neurotróficas. Desarrollos de innovación en la unión europea, y en nuestro país, en el banco de tejidos AmniosBMA, han permitido avanzar en el uso no quirúrgico de la AM, ampliando las patologías de la superficie ocular a tratar, entre ellas, ojo seco severo, conocido como queratoconjuntivitis sicca (QCS), defectos epiteliales de córnea, úlceras corneales neurotróficas, úlceras persistentes, enfermedades mucosinequiantes, etc. Estas patologías, de no ser diagnosticadas y tratadas correctamente, llevan a la ceguera. La analogía clínica en humanos del ojo seco severo canino es el Síndrome de Sjögren (SS) que se caracteriza por infiltrado linfoplasmocitario de las glándulas exocrinas, que son las que producen lágrimas y saliva, lo que lleva a la destrucción de las estas glándulas y sequedad de las mucosas. Las consecuencias de la QCS son una disminución de lágrimas que lleva a una inflamación crónica de la conjuntiva y de la córnea, dolor ocular, queratitis, úlcera y pérdida de la visión. El diagnóstico se realiza por examen con lámpara de hendidura, test de Schirmer, Rosa de Bengala o Lisamina verde. La osmolaridad de la lágrima y la citología de impresión pueden ser útiles para detectar la enfermedad de QCS en etapas tempranas. El tratamiento convencional de la QCS en caninos y humanos suele ser diferente; en canes incluye lágrimas artificiales, ciclosporina, corticoides y antibióticos y en humanos se utiliza ciclosporina, insulina tópica y suero autólogo. El presente trabajo tuvo como objetivo resumir el estado del arte del diagnóstico de ojo seco canino, su tratamiento y se describieron algunos trabajos que utilizan AM para el tratamiento de patologías oculares caninas. Se llevó a cabo la revisión de trabajos publicados. No se encontraron artículos específicos sobre el tratamiento del ojo seco canino con cAM, por lo cual se concluye que es un campo interesante de explorar y con gran potencial de aplicación.
Instituto de Estudios Inmunológicos y Fisiopatológicos